DESCANSO

En esta vida moderna es muy fácil que las actividades laborales, sociales, familiares, etc., me alejen de un buen descanso. No me refiero a dormir, lo que es evidentemente necesario y prioritario. Me refiero a poder vivir, al menos unas horas, a un ritmo lento.

Este domingo fue un día lento, lo que para mí es un lujo. Poder despertar sin alarma, quedarse en la cama acariciando al gato y levantarse para preparar un té y después leer un ratito, observar por la ventana... dejar que el tiempo pase.

Hay actividades que en apariencia tienen poca actividad que resultan lujosísimas, como desayunar delicioso, con calma y de preferencia en pijama. Esos momentos que pueden pasar desapercibidos, que incluso los menospreciamos con frases como "ya perdí toda la mañana" al final son los que nos revitalizan.

Ayer, en mi sesión de acupuntura, el sanador acupunturista me dijo esta frase "Sé menos capitalista", refiriéndose a este mandato de producir continuamente, de tener la agenda llena de todo lo que se tiene y se quiere hacer, dejando un pequeño espacio para solo estar, solo ser.